Amigo lector, estoy seguro que usted ha logrado hacer dibujos en la primaria, y a duras penas en el liceo con la ayuda incondicional de sus padres, hermanos, tíos o amigos, el resultado obtenido ha sido para Usted motivo de orgullo, y por más feo que sea, para Usted ese dibujo ha sido maravilloso.

Supongamos ahora que ese dibujo, boceto o como se le quiera llamar, un día cualquiera es tomado por un amigo, exitoso por cierto, y quien usa tu «obra» para promocionar sus cosas en un negocio lucrativo, como si fuese hecho por él. ¿Qué sentirías?, ¿Qué harías?. Yo no tengo dudas en decirlo, sentiría una gran «arrechera» y de inmediato le reclamaría y si está a mi alcance le  rompería todo lo que tenga dicho dibujo y si el tipo se pone «idiota» unas trompadas se ganaría.

Si Usted ha coincidido conmigo en los párrafos anteriores, le agradezco se tome un poco más de tiempo pues lo que voy a relatar es una historia verdadera, no de un amateur o novato en la pintura, tampoco de un estudiante de bachillerato. Se trata de un hombre reconocido en Mérida, Venezuela y el mundo como un artista plástico. Como dije no se trata de un amateur, se trata de un profesional con larga trayectoria que ha visto como unos completos desconocidos toman su obra y la presentan como propia para decorar, embellecer y otorgarle un supuesto valor agregado artístico a  lo que sería en un futuro las instalaciones de una obra pública. No me cabe la menor duda que este es otro caso digno de VENECONDO, donde el realismo mágico describe perfectamente las cosas irreales que suceden y se justifican en nuestro país.

Iván Darío Hernández, con 36 años de trayectoria nacional e internacional, ex-director del Museo de Arte Moderno de Mérida, funcionario del Instituto Merideño de Cultura, en tiempos del compatriota Giandomenico Puliti, Orden al Mérito Ciudad de Mérida 1810, como ciudadano de la cultura en el año 2004; es en este caso el afectado y Doppelmayr Garaventa Group, líder mundial de calidad y tecnología en el campo de teleféricos, cuenta con plantas productivas, filiales y sucursales de servicio en más de 33 países en el mundo y hasta el presente ha podido realizar más de 14.300 sistemas de teleféricos en más de 87 países; es la agresora e irrespetuosa de la Ley Venezolana y mundial.

La situación es muy sencilla, Iván Darío Hernández realizó una serie de pinturas (pueden verse en el siguiente enlace: http://my.opera.com/ivandarioh/albums/) y la empresa Doppelmayr Garaventa Group uso sin autorización del autor dichas pinturas para decorar los render (término usado en jerga informática para referirse al proceso de generar una imagen desde un modelo, este término técnico es utilizado por los animadores o productores audiovisuales y en programas de diseño en 3D) de la estación Barinitas del sistema Teleférico de Mérida.

He aquí las pruebas:

Podemos ver claramente que hay mutilación de obras artísticas,  violando el derecho de integridad  que toda obra plástica o artística posee, explotación de las mismas  con fines  comerciales concretando el uso ilegal de las imágenes y sobre todo una gran bofetada a la política gubernamental de apoyo a la cultura y al artista plástico venezolano.

Quedan algunas preguntas en el aire:

  • Ministro de la Cultura Pedro Calzadilla, ¿Considera Usted que lo hecho por Doppelmayr Garaventa Group es legal en Venezuela?, ¿Cómo aplicar en este caso la frase «soberanía cultural  en Venezuela»?
  • Sr. Martin Schoffel, representante de Doppelmayr Garaventa Group en Venezuela, ¿Están acostumbrados a hacer ustedes este tipo de infracciones al derecho de autor en los paises donde están trabajando?, ¿es política Doppelmayr Garaventa Group piratear el derecho de autor?, ¿está conciente su bufete de abogados que lo hecho con los Renders es un delito en Venezuela y en el Mundo?
  • Sr. José Gregorio Matínes Davalos, Gerente del Teleférico de Mérida y Ministro del Turismo Alejandro Fleming, ¿son políticas de Ustedes atropellar los derechos de un ciudadano venezolano haciendo un gesto de silencio por el simple hecho de no ver mal parada la obra Teleférico de Mérida?

Vaya Usted, Venezolano, a un país como Austria, y realice una mutilación de una obra artística y promuévala en algún producto suyo, será inmediatamente detenido y juzgado. Entonces, si en Venezuela existe una legislación similar ¿por que las autoridades del estado competentes no se pronuncian al respecto?.

Amigo Iván Darío Hernández, la lucha que Usted ha iniciado para hacer valer sus derecho de autor es parecida a la lucha bíblica de David y Goliat; es Usted contra una gran transnacional que cuenta con todo el apoyo del gobierno nacional para hacer y deshacer en nuestra Sierra Nevada en nombre del desarrollo turístico Merideño.

Lo aliento a seguir en la lucha, mi solidaridad absoluta y desde este blog mi denuncia.

¡ÁNIMO!


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comentarios
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  4. zinahyd dice:

    a mi amigo Ivan Dario. no pierdas la Fe y sigue luchando por hacer valer tus derechos. Si emulas la cita Biblica a la que hace referncia ,,,entonces no desmayes, pues DAVID VENCIO A GOLIAT CON UNA PIEDRA Y UNA HONDA; entonces adelante y éxito..nada es imposible si tenemos la razón.

  5. Pasaron las elecciones, y el tiempo de lucha por nuestra SOBERANÍA CULTURAL llega!

  6. […] Teleférico de Mérida Vs. Piratería Artística. […]

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